Luego de conocerse las diferentes propuestas de los sectores de gobierno, empleadores y trabajadores para el incremento del salario mínimo del 2026, Luis Linares, coordinador del área laboral de la Asociación de Investigación y Estudios Sociales (Asíes), explicó que los aumentos son necesarios, pero deben ser moderados y constantes cada año.
Según Linares, al combinar la moderación y constancia favorece a las empresas y su capacidad de asumir los incrementos, al mismo tiempo, atendería la necesidad de mejorar los ingresos de los trabajadores.
Comentó que es difícil encontrar un equilibrio, porque las empresas enfrentan dificultades si el aumento es muy alto en un solo año, porque solo un sector muy reducido puede costear esos incrementos. Sin embargo, añadió, que también está la necesidad de los trabajadores de cubrir sus gastos.
¿Hasta dónde es razonable el aumento?
Para el analista de Asíes, el 10% de aumento fijado para el 2025 fue considerable y en esos casos, las empresas requieren un período de adaptación para equilibrar sus costos. Por ello, considera que para el 2026 un incremento razonable sería de entre 5% y 6%, tomando en cuenta tanto las posibilidades de las empresas como las necesidades de los trabajadores.
Añadió que el gobierno debería impulsar un ajuste en ese rango, pues aplicar un 10% dos años seguidos sería un impacto muy fuerte, especialmente para las pequeñas empresas de entre 10 y 80 trabajadores, que enfrentan más dificultades para adaptarse a esos costos. Además, en el caso de las microempresas, muchas no pagan el salario mínimo y ofrecen remuneraciones incluso inferiores.
Del otro lado están las propuestas de los sectores en las comisiones paritarias. Linares explicó que los representantes laborales suelen plantear incrementos altos porque deben responder a sus agremiados, y si de inicio solicitan un 10%, no tendrían margen de negociación.
Linares recordó que, cuando fue ministro de Trabajo, impulsó aumentos de entre 5% y 7%, con el objetivo de dar prestigio y aceptación al salario mínimo mediante ajustes moderado, para que no se percibieran como medidas abusivas.
“Esa podría ser mi recomendación para el gobierno: que impulse incrementos moderados cada año para lograr consenso social, porque cuando hay aumentos cada dos años, el jalón tiene que ser más fuerte”, expresó, porque al momento de nivelarlos con indicadores como la inflación o al intentar recuperar el poder adquisitivo, las alzas podrían resultar drásticas.
Propuestas de los sectores
El martes 9 de septiembre se presentaron las propuestas en la comisión de actividades agrícolas para la Circunscripción Económica 1 (Guatemala), confirmó Carla Caballeros, directora ejecutiva de la Cámara del Agro; ahí el sector laboral planteó un incremento de 69% (para que el salario diario llegue a Q200), el sector de gobierno propuso un 3%, y el sector empleador, un ajuste al alza del 2%.
La directiva explicó que la propuesta del sector empleador se basa en la fórmula de productividad, promovida desde hace años, y subrayó que impulsar aumentos con base en este criterio facilitaría la creación de empleos formales y reduciría la informalidad. Recordó que en el área rural 8 de cada 10 personas trabajan en la informalidad con ingresos menores al salario mínimo, por lo que las alzas por decreto solo amplían esa brecha.
Agregó que aumentar el salario mínimo sin resolver los sobrecostos estructurales de los últimos años —como el mal estado de las carreteras o la espera de más de 45 buques durante 70 días en los puertos— incrementa la informalidad laboral.
En tanto en la comisión de maquilas para la Circunscripción Económica 2 (que comprende todos los departamentos del país excepto el departamento de Guatemala), el gobierno propuso un aumento de 5%, mientras que el sector laboral pidió que el salario diario también llegue a Q200 (94% más que el salario actual en esa región y actividad), y el sector empleador propuso 2%, según Alejandro Ceballos, vicepresidente de la Asociación de la Industria de Vestuario y Textiles (Vestex) y representante ante la CNS.
Por aparte, Franky Pozuelos, representante del sector laboral en la CNS, indicó que la reunión para recibir las propuestas de todas las comisiones paritarias se llevará a cabo en la última semana de septiembre. Señaló que la posición del sector trabajador en las distintas comisiones paritarias es que el salario llegue a Q200 diarios.
Consultado sobre la propuesta del sector gubernamental, Pozuelos respondió: “En lo personal, todo lo que contribuya a mejorar las condiciones de vida de los trabajadores es bien visto por nuestro sector y, si la propuesta del gobierno mejora esas falencias por pérdida adquisitiva, es de aplaudirla. Además, en el contexto, podría entenderse el 10% de aranceles más un 2% inflacionario… pero hasta conocer la propuesta podremos saber; de lo contrario, todo lo dicho es especulación”.
El posible 12%
El lunes 8 de septiembre se realizó una reunión virtual con integrantes de la Comisión Nacional del Salario y de las comisiones paritarias, aunque se trataron otros temas, en la cita se leyeron las propuestas de los sectores para cada paritaria, entre ellas la de un incremento de 12% de parte del sector gubernamental, según fuentes del sector empresarial, aunque no especificaron actividad o región.
La propuesta del 12% también la hizo el sector de gobierno en la reunión de ese lunes en la comisión paritaria de la actividad no agrícola para la CE1 o departamento de Guatemala, confirmó el martes Guido Ricci, director de la Unidad Laboral del Comité Coordinador de Asociaciones Agrícolas, Comerciales, Industriales y Financieras (Cacif) y representante en la CNS.
Ese día el sector empleador reaccionó con sorpresa. Ricci, declaró que la cifra del 12% propuesta por el sector gubernamental en mencionada paritaria carece de fundamento técnico y que incentivaría la informalidad.
Para la actividad no agrícola en la CE1 el sector empleador presentó su propuesta de un 4% de aumento, y prevé presentar en lo que resta de la semana un 2% para la CE2, las cuales, expresó Ricci considera propuestas más técnicas y fundamentadas.
Un incremento desmedido al salario mínimo comprometería el futuro de las micro, pequeñas y medianas empresas y la competitividad del país. pic.twitter.com/SJfiaPcXgz
— Cámara de Industria de Guatemala (@industriaguate) September 10, 2025
Prensa Libre solicitó al Ministerio de Trabajo información sobre la propuesta del gobierno. El lunes 8 de septiembre no hubo respuesta y el día siguiente la institución indicó que no podría emitir postura porque el proceso sigue en curso en las comisiones paritarias y la CNS espera los informes de estas.
Ese mismo martes 9 de septiembre por la tarde, el Ministerio de Trabajo emitió un comunicado exponiendo el proceso para la fijación del salario mínimo e indicando que las Comisiones Paritarias no han concluido su proceso de diálogo y formulado sus recomendaciones por lo que aún no se está en la fase en que el Gobierno de la República de Guatemala tome una decisión al respecto.
Los tres sectores, gubernamental, empleador y laboral presentan sus respectivas propuestas a las comisiones paritarias, estas luego emiten un informe a la CNS y en esta instancia cada sector puede mantener su postura o modificarla, sin embargo, es el presidente de la República quien toma la decisión, lo cual debe ser antes del 1 de enero del próximo año.
Ricci consideró positivo que el Mintrab explique públicamente que aún falta proceso por recorrer para una decisión final del salario mínimo, por lo que deja ver que el 12% propuesto por el representante del sector gubernamental en una de las paritarias no es definitivo.