El secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio, dijo este viernes tras reunirse con su par chino, Wang Yi, en Kuala Lumpur, que fue un encuentro “muy productivo” que podrá servir para aportar “estabilidad” a las relaciones entre las potencias, enfrentadas por la guerra comercial y crisis como la de Ucrania.
“Ha sido un encuentro muy productivo. No ha sido una negociación, ha sido una reunión positiva. Y es importante que Estados Unidos y China tengan reuniones productivas y contacto regular y comunicación”, dijo Rubio a los medios de comunicación tras mantener su primera reunión con su homólogo chino desde que ocupa el cargo.
El jefe de la diplomacia estadounidense, que participó, como Wang Yi, en las reuniones del bloque del Sudeste Asiático en Kuala Lumpur esta semana, consideró que el encuentro fue “muy constructivo” y que, “con suerte”, se podrá “continuar” trabajando “para traer estabilidad” a las relaciones.
También afirmó tras la reunión, que duró alrededor de una hora según la agencia de noticias malasia Bernama, que Washington buscará una fecha “adecuada” para que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, visite China, sin dar indicaciones de cuándo podría ser.
“El presidente Trump ha sido invitado a visitar China. Es una visita que él quiere hacer y trabajaremos para encontrar la fecha adecuada para ello. Estoy seguro de que sucederá porque los dos presidentes (Trump y Xi Jinping) quieren que suceda”, dijo Rubio.
Trump ya aseguró a comienzos de junio que Xi lo había invitado a visitar el país durante una conversación telefónica que mantuvieron entonces, centrada “casi exclusivamente” en la guerra comercial y que el neoyorquino calificó de “muy positiva”.
La reunión entre Rubio y Wang tiene lugar después de que a finales de junio los dos países llegaran a un acuerdo comercial en Londres que incluía, según Trump, un arancel estadounidense del 55% a productos chinos y otro del 10% a los bienes del país norteamericano por parte de Pekín.
Por otro lado, el jefe de la diplomacia estadounidense declaró ayer a los medios de comunicación desde Kuala Lumpur que buscaba una reunión con Wang para discutir sobre el “apoyo” de China a Rusia en la guerra de Ucrania, en medio de un aumento de ataques aéreos lanzados por Moscú, sin que hoy hiciera de momento alusión a ello.
Tanto Rubio como el canciller chino mantuvieron el jueves una cita bilateral con el ministro ruso de Exteriores, Serguéi Lavrov, quien también acudió a la reunión de la Asociación de Naciones del Sudeste Asiático (ASEAN).
La isla autogobernada de Taiwán, a la que Estados Unidos suministra armamento y que China no descarta invadir, y la tensión en el mar de China Meridional son otros escollos entre las grandes potencias.