Disfunción eréctil y células madre – La Prensa Gráfica

Disfunción eréctil y células madre - La Prensa Gráfica

La disfunción eréctil es una condición que afecta a un gran número de hombres en El Salvador y en el mundo, impactando su salud física, su bienestar emocional y sus relaciones personales, pero la terapia con células madre ha surgido como una opción que ha demostrado resultados muy alentadores en la recuperación de la función eréctil. Esta terapia actúa regenerando los vasos sanguíneos, los nervios y los tejidos dañados del pene, restaurando la capacidad eréctil de manera natural y duradera. A diferencia de los tratamientos convencionales, que solo alivian temporalmente los síntomas, las células madre activan los mecanismos propios del cuerpo para reparar y mejorar la calidad del tejido a nivel celular.
Los datos clínicos disponibles muestran que el 100 % de los pacientes tratados con células madre adiposas experimentan una mejora significativa en su función sexual, con un aumento en la puntuación del Índice Internacional de Función Eréctil (IIEF) de una media de 12.9, correspondiente a disfunción eréctil moderada, a 18 puntos, que indica una disfunción leve. Esto representa una mejora relativa cercana al 40-50 % en la función eréctil, lo que se traduce en una recuperación sustancial en la calidad de la vida sexual. Además, más del 50 % de los hombres logran mantener relaciones sexuales sin necesidad de medicación a los 6 o 7 meses después del tratamiento, y estos efectos positivos pueden mantenerse incluso después de un año. En casos específicos, como en pacientes diabéticos, se ha reportado que hasta el 85.7 % experimentan un aumento notable en la dureza del pene, lo que es un indicador clave de la recuperación funcional.
El procedimiento para administrar estas células es mínimamente invasivo y, generalmente, consiste en inyecciones directas en el tejido del pene o, en algunos casos, en infusión intravenosa. Los pacientes suelen comenzar a notar mejoras dentro de uno a tres meses, con un desarrollo completo de los efectos en un plazo de tres a seis meses. La duración de la mejoría puede extenderse entre uno y tres años con un solo tratamiento, una ventaja frente a las terapias convencionales que requieren uso repetido y planificación previa a la actividad sexual. Esto permite a los hombres disfrutar de una vida sexual espontánea y sin la ansiedad que genera la dependencia de medicamentos.
Además, los pacientes reportan mejoras en su bienestar general, incluyendo mayor energía, mejor salud física, bienestar emocional y funcionamiento social. La recuperación de la función sexual contribuye a aumentar la confianza en sí mismos y a reducir el estrés y la tensión en sus relaciones de pareja, factores que a menudo se ven afectados negativamente por la disfunción eréctil.
Los estudios internacionales, que incluyen ensayos con pacientes que han sufrido disfunción eréctil tras cirugías de próstata o por diabetes, respaldan estos resultados. Por ejemplo, un ensayo en Dinamarca mostró que ocho de cada 21 hombres recuperaron suficiente función eréctil para mantener relaciones sexuales sin medicamentos, y esta mejora se mantuvo durante al menos un año. Otros estudios han confirmado la seguridad del tratamiento, sin reportar efectos adversos graves, lo que refuerza la confianza en esta terapia como una opción segura y efectiva para hombres de distintas edades y condiciones.
La terapia con células madre representa un avance significativo en el tratamiento de la disfunción eréctil; ofrece a los pacientes una solución que va más allá del alivio temporal. Este enfoque regenerativo no solo mejora la función sexual, sino que también impacta positivamente en la calidad de vida y el bienestar emocional de quienes la reciben. En El Salvador, donde la disfunción eréctil afecta a un gran número de hombres, esta terapia abre una puerta esperanzadora para recuperar la salud sexual y la confianza personal, contribuyendo a mejorar la vida íntima y social de muchos. La combinación de eficacia, seguridad y duración de los resultados convierte a las células madre adiposas en una alternativa valiosa que está transformando el panorama del tratamiento de la disfunción eréctil.

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