El desempeño de los judocas cubanos en el Campeonato Mundial de Budapest 2025 dejó un sabor agridulce, al no conseguir medallas en el torneo individual y despedirse prematuramente en la mayoría de los combates, aunque tampoco es un resultado alejado de los pronósticos precompetencia.
Nuestros nueve representantes enfrentaron rivales de alto nivel y solo Orlando Polanco (66 kg) logró acercarse al podio, alcanzando un meritorio quinto lugar tras medirse con figuras de la talla del japonés Hifumi Abe, doble campeón olímpico y cuatro veces monarca mundial.
La principal carta cubana, Andy Granda (+100 kg), campeón mundial en Taskent 2022 y quinto en los recientes Juegos Olímpicos de París, no pudo avanzar más allá de su primer combate. Su derrota frente al azerí Ushangi Kokauri, quien también ha demostrado gran fortaleza en competencias europeas y Grand Slams, evidenció la creciente exigencia en la élite del judo mundial.
De igual forma, Jonathan Loynaz y Dayanara Curbelo cayeron, ayer, en sus primeras presentaciones, ambos por ippon ante rivales experimentados de Chipre y Japón respectivamente.
Otros judocas cubanos como Jonathan Charón, Maylín del Toro, Zail Ramírez, Lianet Cardona y Lisrialis González tuvieron efímeras actuaciones y no lograron superar las exigencias del certamen, quedando eliminados en primeras o segundas rondas.
Estos resultados contrastan con las expectativas depositadas en el equipo dirigido por los entrenadores Julio Alderete y Boannys Chang, quienes contaron con el apoyo del preparador Antonio Becali y el médico Edel Robaina.
Japón consolidó su dominio con seis medallas de oro, cuatro plata y cuatro bronce. El torneo individual reunió a 556 atletas de 93 países, mostrando la competitividad y el alto nivel que exige mantenerse entre los mejores del mundo.
En cuanto al certamen por equipos mixtos, programado para este viernes, la delegación cubana no participará debido a problemas logísticos relacionados con la reservación de vuelos de regreso, según informó Andrés Taño, comisionado nacional a la acn. Esta situación lamentable impide que los judocas cubanos tengan la oportunidad de reivindicarse en una modalidad que podría favorecer sus aspiraciones internacionales.
