El primer lunes de mayo no es un lunes cualquiera, es la gala benéfica del Instituto del Traje del Museo Metropolitano de Arte, también conocida como los Oscar de la Costa Este o la fiesta del año. Nosotros lo consideramos los X Juegos de la Moda.
Este año, sin embargo, las cosas son un poco más complicadas, en parte porque el primer lunes de mayo es también la mitad de las eliminatorias de la NBA y el comienzo de la selección del jurado en el juicio a Sean Combs.
¿Por qué importan las eliminatorias de la NBA? Porque LeBron James es el presidente de honor de la gala, y si sus Lakers de Los Ángeles llegan a las semifinales de conferencia, no podrá asistir.
La reina que todo lo supervisa es Anna Wintour, directora de contenidos de Condé Nast y editora de la revista de moda Vogue. Wintour ha sido el cerebro principal de la gala desde 1999, después de hacerlo por primera vez en 1995, y ha transformado el evento de una gala benéfica común y corriente en un megamuestrario de la visión del mundo de Vogue: el coctel de los nombres famosos de la moda, el cine, la tecnología, la política, los deportes y, cada vez más, las redes sociales.
Junto a Wintour como copresidentes de la gala 2025 estarán el músico y diseñador de ropa masculina Pharrell Williams, el rapero ASAP Rocky, el piloto de Fórmula 1 Lewis Hamilton y el actor Colman Domingo. Por primera vez desde 2019, también habrá un comité anfitrión junto con los presidentes: los atletas Simone Biles y Jonathan Owens, el dramaturgo Jeremy O. Harris, la escritora Chimamanda Ngozi Adichie, la estrella de Broadway Audra McDonald, los cantantes Tyla y Usher.
El tema
Este año se trata de la expo de primavera del Instituto del Traje, titulada Superfine: Tailoring Black Style, que se centrará en la historia y la influencia del dandi negro en el mundo occidental, en el modo en que la moda se ha utilizado como herramienta tanto de esclavitud como de liberación.
La exposición se inspira en el libro de 2009 Slaves to Fashion: Black Dandyism and the Styling of Black Diasporic Identity, de Monica L. Miller, profesora de Estudios Africanos del Barnard College, y ha sido curada conjuntamente por Miller y Andrew Bolton, conservador responsable del Instituto del Traje, conocido en inglés como Costume Institute.
También es la primera exposición del Instituto del Traje dedicada exclusivamente a la ropa masculina desde Bravehearts: Men in Skirts, de 2003, y la primera en la que solo participan diseñadores de color.
Suena importante, y lo es. La exposición es la culminación de un reequilibrio de los fondos y el enfoque del Instituto del Traje que Bolton adoptó en 2020 tras el asesinato de George Floyd. Ha permitido a Bolton tanto utilizar piezas de la propia colección del Met como adquirir más piezas de diseñadores de color.
El año pasado, Miller dijo a The New York Times que la exposición era “una oportunidad para que todos los miembros del equipo de curadores comprendieran realmente cuántos diseñadores negros, histórica y contemporáneamente, hay ahí fuera”.
También llega en un momento en que la DEI (Diversidad, Equidad e Inclusión) está siendo atacada por el gobierno de Donald Trump. Esfuerzos similares en universidades y museos de todo el país han puesto en la diana a las instituciones que los acogen.
A diferencia de otros pesos pesados de la cultura, como el Instituto Smithsoniano, al que el presidente Trump señaló recientemente en una orden ejecutiva, el Metropolitan recibe muy pocos fondos federales, por lo que es mucho menos vulnerable a la presión de Washington.
Famosos involucrados
Como P. Diddy y fundador de la línea de moda Sean John, Combs se presentó en un momento dado como una especie de encarnación del tema de la muestra. Si no hubiera sido imputado por cargos federales de organización criminal y tráfico sexual el año pasado, es casi seguro que habría estado en el acto. (Combs, que lleva recluido en una cárcel de Brooklyn desde septiembre, solía asistir a la gala con regularidad; la última vez en 2023, cuando estrenó Sean John couture).
De hecho, algunos implicados estaban al parecer preocupados porque la tensión entre la fiesta y el juicio interfiriera en la velada. Hubo incluso rumores de algunas peticiones para mover la fiesta, pero no se consiguió.
El espectáculo está diseñado por la artista Torkwase Dyson, y cuenta con cabezas de maniquí creadas por Tanda Francis, artista conocida por sus esculturas de cabezas y máscaras africanas monumentales. Iké Udé, un artista multimedia a quien Bolton llamó el dandy contemporáneo definitivo, es un asesor especial, y Tyler Mitchell, el primer fotógrafo negro que fotografió una portada de Vogue, creó un ensayo fotográfico especial para el catálogo.

El menú de la cena de gala será creado por Kwame Onwuachi, chef y escritor estadunidense de origen nigeriano.
El costo de todo esto
Las entradas individuales para la gala cuestan a partir de 75 mil dólares, y las mesas de 10 se venden por 350 mil dólares. Todo el dinero de la venta de entradas se destina directamente a financiar el presupuesto anual del Instituto del Traje.
Este año, entre los patrocinadores figuran Louis Vuitton (Pharrell Williams es el diseñador de ropa masculina de Vuitton), Instagram, Africa Fashion International, Tyler Perry y Condé Nast.
¿Por qué el dinero tiene que ir al presupuesto del Instituto del Traje? Es el único departamento curatorial del Met que debe pagarse a sí mismo, según un extraño acuerdo que data de 1946, cuando el Museo de Arte del Traje se fusionó con el Met, y la moda no se consideraba una forma de arte del todo respetable. Y aquí entra la gala. La del año pasado recaudó unos 26 millones de dólares; en comparación, la gala de reapertura de la Colección Frick, celebrada en abril, recaudó 3.7 millones de dólares.
La lista de invitados es un secreto muy bien guardado. A diferencia de otras recaudaciones de fondos culturales, como la gala de inauguración de la temporada de la Ópera Metropolitana, a la Met Gala solo se puede asistir con invitación. Los requisitos para la inclusión tienen más que ver con la expectación, los logros y la belleza —la santísima trinidad de Wintour— que con el dinero. La editora de Vogue tiene la última palabra sobre todas las invitaciones y asistentes.
Esto significa que, aunque dones mucho dinero al museo, no necesariamente cumplirás los requisitos, y aunque una empresa compre una mesa, no puede elegir quién se sentará en ella. Tiene que pasar todas las propuestas de invitados por Wintour y Vogue, y rezar para que las aprueben. Este año, como en 2024, hay unos 400 elegidos, según una portavoz del Instituto del Traje.
¿Irá Rihanna?
Dado que su pareja, ASAP Rocky, es uno de los presidentes, lo más probable es que la respuesta sea sí, aunque con ella nunca se sabe. (El año pasado, confirmó su asistencia y luego se puso enferma en el último momento).
Los deportistas se están convirtiendo cada vez más en los invitados famosos del día, así que puedes esperar un puñado de jugadoras de baloncesto, incluida la número 1 del draft de la WNBA, Paige Bueckers, así como, según se dice, Shakira, Mary J. Blige y Lizzo. Probablemente también habrá una o dos Kardashian/Jenner, a juzgar por la asistencia de los años anteriores.
También estarán presentes varios jóvenes diseñadores negros, como LaQuan Smith, muchos de ellos invitados por primera vez.
Los famosos no compran sus entradas, son invitados por marcas (a veces por indicación de Vogue), que compran sus asientos en la mesa, además de confeccionar a medida sus atuendos, hacerlos volar y alojarlos. A cambio, los invitados famosos trabajan el ángulo de la moda. Por supuesto, siempre pueden hacer un donativo al museo.
Código de vestimenta
Este año es “A tu medida”, una directriz adecuadamente vaga. Al fin y al cabo, dado que la mayoría de los trajes de la Met Gala se confeccionan específicamente para quien lo viste, en teoría todos están hechos a la medida. Aun así, el tema puede contrarrestar la tendencia de los invitados a disfrazarse que ha caracterizado algunas de las galas recientes.
¿Recuerdas cuando Billy Porter, como un ave fénix de alas doradas, fue llevado a la fiesta de celebración del tema “Camp” en 2019 por seis hombres sin camiseta? ¿O cuando Jared Leto llegó a la gala que celebraba a Karl Lagerfeld en 2023 vestido como la gata de Lagerfeld?
Sin embargo, como Vuitton es patrocinador, verás muchas creaciones de esa marca. También muchos trajes.
Para ofrecer una visión desde dentro de la gala, Vogue retransmitirá el evento en directo por quinto año consecutivo. La La Anthony y Emma Chamberlain, presentadoras el año pasado, estarán acompañadas ahora en la alfombra roja por Teyana Taylor y Ego Nwodim. Puedes esperar que vayan más allá de “¿Qué llevas puesto?”