El secreto de un emprendimiento exitoso: pasión personal, talento y necesidad real del mercado

El secreto de un emprendimiento exitoso: pasión personal, talento y necesidad real del mercado

Hugo Díaz, director ejecutivo del programa Acton MBA de la Universidad Francisco Marroquín (UFM), ofreció recientemente una clase magistral dirigida a los suscriptores de Prensa Libre, donde compartió su experiencia sobre los errores financieros más comunes que cometen los emprendedores en Guatemala. 

Durante la sesión, el experto explicó que muchos emprendimientos fracasan por una razón principal: no entender cómo funcionan las finanzas de su propio negocio

En su intervención, abordó conceptos clave, compartió ejemplos prácticos y dio consejos para quienes están empezando en el mundo del emprendimiento o quieren mejorar su gestión empresarial.

Fracasar rápido, perder poco y aprender mucho 

Una de las ideas centrales que Díaz transmitió fue que el fracaso temprano puede ser una ventaja si se aprende de él. “Quien fracasa rápido, pierde poco”, afirmó. 

Pero para que esa pérdida no sea irreparable, es necesario que el emprendedor se prepare, se eduque y conozca bien el entorno en el que opera. 

También enfatizó que un emprendedor exitoso debe ser operativo: salir a la calle, conocer a sus clientes, dominar su producto o servicio y saber cómo venderlo. 

Siete errores que hunden a los negocios desde el inicio: 

Entre los errores más frecuentes que detecta en los nuevos emprendedores, según compartió el experto, están los siguientes: 

1. No entender el flujo de efectivo 

Uno de los errores más comunes y graves que cometen los emprendedores es no comprender cómo funciona el flujo de efectivo

Aunque muchos saben leer un estado de resultados, donde aparecen los ingresos, gastos y utilidad neta, pocos entienden que ese documento no refleja la liquidez real del negocio

El flujo de efectivo incluye factores como inventario, cuentas por cobrar, impuestos, inversiones en activos fijos y cuentas por pagar, que impactan directamente la disponibilidad de dinero para operar.

Si no se domina este concepto, un negocio puede parecer rentable en papel, pero estar en la quiebra en la práctica. 

2. No diferenciar entre utilidad bruta, utilidad neta y EBITDA 

Comprender la diferencia entre utilidad bruta, utilidad neta y EBITDA (siglas en inglés de Earnings Before Interest, Taxes, Depreciation and Amortization, en español ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización) es esencial para cualquier emprendedor.  

La utilidad bruta se obtiene al restar los costos directos de los ingresos. 

Luego, al restar los gastos operativos y administrativos, se obtiene la utilidad neta

Ejemplo de flujo de efectivo, explicado por Hugo Díaz, director ejecutivo del programa Acton MBA de la Universidad Francisco Marroquín, UFM)

El EBITDA, por su parte, permite analizar la rentabilidad del negocio sin tomar en cuenta factores financieros o contables, y es un indicador muy utilizado por inversionistas. 

Desconocer estas diferencias lleva a interpretar mal la salud financiera de la empresa. 

3. Ignorar las variables ocultas que afectan la caja 

El estado de resultados no muestra todo. Muchos emprendedores no toman en cuenta el impacto que tienen las inversiones en inventario, compras de equipo o cuentas por cobrar

Por ejemplo, aunque una empresa tenga ingresos altos, si la mayoría del dinero está atrapado en productos que aún no se venden o en clientes que no han pagado, el negocio puede quedarse sin dinero para pagar salarios o proveedores. 

Estas variables ocultas son parte del capital de trabajo, y entenderlas es vital para mantener una operación financiera sana

4. No saber identificar los cuellos de botella del negocio 

Un cuello de botella es el punto del proceso productivo que limita el rendimiento general. Si no se detecta correctamente, cualquier inversión será ineficaz. 

Por ejemplo, en una pizzería, si el horno solo puede hornear 20 pizzas por hora, aumentar la cantidad de personal en la caja o cocina no mejorará la producción.

Ejemplo de cuello de botella, explicado por Hugo Díaz, director ejecutivo del programa Acton MBA de la Universidad Francisco Marroquín, UFM)
Ejemplo de cuello de botella, explicado por Hugo Díaz, director ejecutivo del programa Acton MBA de la Universidad Francisco Marroquín, UFM)

El resultado: más gastos, sin más ingresos. Detectar dónde se estanca el proceso es crucial para escalar el negocio y mejorar la eficiencia operativa

5. Invertir en áreas equivocadas por no conocer el proceso crítico 

Cuando el emprendedor no tiene claridad sobre dónde está el verdadero obstáculo del negocio, puede invertir recursos en soluciones inútiles

Esto no solo retrasa el crecimiento, sino que consume tiempo, dinero y energía. 

Muchas veces se contrata más personal, se mejora la publicidad o se compra equipo nuevo, sin darse cuenta de que el verdadero problema está en otro lugar del proceso operativo. Invertir sin estrategia puede ser tan riesgoso como no invertir en absoluto. 

6. No invertir en capacitación desde el inicio 

Uno de los errores más frecuentes al emprender es pensar que capacitarse es un gasto innecesario, especialmente al inicio. 

Sin embargo, los errores derivados de la falta de formación pueden salir mucho más caros, detalla Díaz. 

Entender los conceptos financieros, operativos, legales y de mercado es lo que permite tomar decisiones con base en información y no en intuición

Capacitarse es una inversión que reduce la probabilidad de fracaso

La educación empresarial no solo evita errores, también mejora los resultados. 

Por ejemplo, una capacitación en ventas puede aumentar la tasa de conversión de prospectos, lo que significa más ingresos con el mismo esfuerzo. 

En muchos casos, una inversión en formación se recupera en cuestión de semanas o meses, mientras que los errores derivados de la ignorancia pueden dejar secuelas durante años. Invertir en conocimiento es acelerar el camino al éxito. 

7. Usar el factoraje sin conocer su verdadero costo 

El factoraje permite anticipar el cobro de facturas, pero no es un financiamiento barato, explica Díaz. 

Añade que, muchos emprendedores lo usan constantemente sin considerar que las comisiones y tasas reducen considerablemente su utilidad. 

Este mecanismo debe ser una solución puntual y no una práctica habitual, ya que refleja problemas de flujo de efectivo y mala gestión de cobros. 

Usarlo sin una estrategia clara puede afectar la rentabilidad y sostenibilidad del negocio

El nuevo ecosistema emprendedor en Guatemala 

Díaz recordó que, aunque muchos emprendimientos surgieron durante la pandemia, hoy el entorno es muy diferente. 

Guatemala cuenta con un ecosistema más maduro, con incubadoras, aceleradoras y firmas de capital de riesgo interesadas en invertir en ideas innovadoras. Esto les da a los emprendedores la posibilidad real de crecer, siempre y cuando sepan hacer un buen pitch de negocios y tengan claridad sobre el retorno esperado por los inversionistas. 

¿Cuál es el equipo ideal para emprender? 

Otra de las claves del éxito es contar con un equipo balanceado

Díaz sugiere que el “dúo perfecto” está conformado por una persona con habilidad comercial (que sepa vender) y otra con dominio de la parte operativa y administrativa

¿Cómo perder el miedo a emprender? 

El miedo al fracaso es uno de los mayores obstáculos para iniciar un negocio. Díaz recomienda: 

  • Prepararse y capacitarse antes de emprender. 
  • Trabajar previamente en la industria en la que se desea emprender, para aprender sin arriesgar capital propio. 
  • Entender que todo negocio implica riesgos, pero estos se pueden reducir con conocimiento y experiencia. 

¿Cuándo es buen momento para solicitar un préstamo bancario? 

Pedir financiamiento es una decisión delicada. Según Díaz, el mejor momento para hacerlo es cuando la empresa ya ha alcanzado cierta estabilidad en sus ingresos y cuando el emprendedor conoce con claridad su flujo de caja

De lo contrario, el préstamo puede convertirse en una carga insostenible. 

Adaptabilidad: una necesidad en la era de la inteligencia artificial 

Finalmente, el especialista enfatizó que todo emprendedor debe tener capacidad de adaptación, especialmente en un mundo donde tecnologías como la inteligencia artificial (IA) están transformando radicalmente los modelos de negocio. 

El emprendimiento ideal, concluye, “es aquel que combina tres elementos: una pasión personal, un talento propio y una necesidad real del mercado por la cual la gente esté dispuesta a pagar”. 

Otros consejos financieros clave para emprendedores 

  • Evitar el uso excesivo de factoraje, ya que se trata de una forma de financiamiento costosa. 
  • Diseñar e implementar controles financieros eficientes para garantizar la sostenibilidad del negocio. 
  • Optimizar el flujo de caja y eliminar cuellos de botella son acciones que incrementan la probabilidad de éxito

Iniciar un negocio no es tarea fácil, pero con educación, análisis, visión estratégica y una buena administración financiera, es posible evitar errores que matan un emprendimiento.

Hugo Díaz lo deja claro: el peor error es no saber manejar el flujo de caja, porque “los errores operativos se pueden mejorar, pero el flujo de efectivo es la vida o la muerte del negocio”. 

Fuentes

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