El Colegio Médico de El Salvador (COLMEDES) fue fundado el 14 de julio de 1943 por 21 médicos visionarios, liderados por el Dr. Arturo Romero López, como una asociación gremial sin fines de lucro. El acto se llevó a cabo en la Sociedad de Beneficencia Pública. Desde su creación, ha tenido como principales objetivos mantener y elevar el nivel científico, cultural y moral de sus miembros, defender y proteger el ejercicio profesional de los médicos, así como colaborar en la investigación y solución de problemas de salud de interés nacional y gremial.
Debido a que estamos próximos a conmemorar 82 años de fundación, quiero contribuir, en los próximos párrafos, con dar a conocer “una historia que merece ser contada”, la de mi querido COLMEDES.
Otros datos históricos relevantes que me gustaría agregar son los siguientes: obtuvo personería jurídica el 24 de enero de 1944; se publican sus estatutos el 24 de febrero del mismo año. Alrededor de julio de 1944 se crea la Sección de Especialidades, precursora de las actuales filiales, que en un principio fueron once. En 1945 contaba con 81 asociados, adquiere su primer local (Casa de la Providencia), y se crean los comités de defensa gremial y actividades científicas. Quiero agregar que, en 1947, se publica por primera vez la revista Archivos del Colegio Médico de El Salvador. Finalmente, en 1968 se inauguran nuestras propias instalaciones en la colonia Miramonte, donde se encuentra su sede actualmente.
A lo largo de estas ocho décadas, COLMEDES ha construido una imagen respetable dentro y fuera de nuestras fronteras patrias, llegando a ser referente, formador y líder en los campos de la investigación científica y formación continua, el respeto al código de ética y la defensa gremial. Esto le ha valido el reconocimiento de sus pares a nivel continental, elevando aún más la imagen de uno de los gremios más prestigiosos de El Salvador.
Para validar lo anteriormente manifestado, podemos traer a cuenta el aporte que ha brindado a la salud de la población salvadoreña. En las décadas de los 40 y 50, muchos de sus miembros participaron en campañas contra enfermedades prevalentes como la tuberculosis, malaria, infecciones gastrointestinales y epidemias infantiles. COLMEDES participó activamente en los debates previos a la creación del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS); además, participó desde un inicio en el Consejo Directivo del ISSS, hasta que el año pasado, por decisión de la Asamblea Legislativa, fue excluido de esta institución.
Durante los años más difíciles del conflicto armado salvadoreño (1980–1992), COLMEDES jugó un papel importante en la denuncia de violaciones a los derechos humanos, especialmente en lo referente al derecho a la salud. Muchos de sus miembros estuvieron involucrados en iniciativas humanitarias, mientras otros fueron perseguidos. Tanto fue así, que la Junta Directiva, presidida por el distinguido neurólogo pediatra Dr. Rafael García Castro (Q.E.P.D.), tuvo que presentar su renuncia en pleno debido a amenazas a su integridad física emitidas por los escuadrones de la muerte.
COLMEDES, junto con el sindicato de médicos del ISSS, el sindicato de médicos del Hospital Nacional Rosales y la población salvadoreña, llevó a cabo la lucha en contra de la privatización de la salud pública, la cual se logró detener después de una huelga de nueve meses de duración, durante la gestión del expresidente Lic. Francisco Flores.
A finales de 2018, COLMEDES trabajó de manera integrada con representantes de las diferentes asociaciones filiales de especialistas, facultades de Medicina de diversas universidades del país, sindicatos de salud, representantes de hospitales privados, proveedores y usuarios de los servicios asistenciales. Este trabajo culminó en un documento denominado Propuesta para un Pacto Político Nacional para el Desarrollo de la Salud en El Salvador, que fue entregado a los candidatos presidenciales previo a las elecciones del 3 de febrero de 2019.
En años más recientes, ha sido un ente crítico en la gestión de crisis sanitarias como la pandemia de COVID-19; ha emitido comunicados técnicos y éticos frente a decisiones gubernamentales, pidiendo transparencia, protección del personal de salud y uso adecuado de los recursos.
Podemos concluir este artículo afirmando que COLMEDES, desde sus orígenes, ha sido más que un gremio: ha sido pilar técnico y ético en la construcción de un sistema de salud que brinde servicios de calidad, equidad y calidez a la población salvadoreña. Es por ello que, en las vísperas de nuestro aniversario número 82 de fundación, consideré pertinente dar a conocer la importante labor que hemos realizado en nuestro querido país, a través de “una historia que merece ser contada” y conocida por la población salvadoreña, por las nuevas generaciones y también por las no tan nuevas de médicos del país.
